Liderazgos que Trascienden: Del éxito al significado

El lunes 2 de enero, muy temprano, me escribió mi médico desde New York. Tenía una cita con él tres días más tarde, sin embargo, me pidió una videollamada lo antes posible. También solicitó que mi esposa estuviese presente.

El cáncer, tanto en mí como en mis cercanos, me ha enseñado que, más importante que el éxito, es el significado.

En un mundo donde el éxito se mide regularmente por logros materiales y reconocimiento personal, hay líderes que se esfuerzan por ir más allá, buscando un significado que trascienda sus logros. En diversas comunidades y naciones, estos líderes están dejando huellas imborrables, marcando la pauta para una nueva generación.

Por muchos años, he tenido el privilegio de vivir en un entorno vibrante, conociendo a personas muy exitosas del mundo corporativo. Esto, gracias a mi labor como consultor de empresas pymes y del Fortune 500. Lo que más me impresiona de muchos de estos directivos, gerentes o dueños de empresas es que ya no están persiguiendo tanto el éxito, sino que tienen un deseo genuino de transmitir lo que han aprendido o disfrutado a las próximas generaciones. Quieren mejorar el mundo.

Tengo el honor de trabajar con John Maxwell, un reconocido autor y experto en liderazgo, liderando en la República Dominicana una fundación sin fines de lucro llamada “Dominicana se Transforma”. Esta fundación está comprometida con el crecimiento del país, aportando buenos valores a jóvenes y adultos a través de la formación.

John dice: "El liderazgo no se trata de ser el mejor. Se trata de hacer que los demás sean mejores". Creo que esta frase captura la esencia del liderazgo que trasciende: un liderazgo que no se centra en la gloria personal, sino en empoderar a otros para alcanzar su máximo potencial.

Cuando conoces a John, al poco tiempo de estar con él te hace sentir que está realmente interesado en ti, que eres el centro de su atención y buenos deseos, además de animarte a ser más y a ir por más. Es imposible no quedar prendado con un hombre así, pero más importante aún, es el impacto positivo que genera en las vidas que toca.

En el corazón del liderazgo que trasciende encuentro humildad. Encuentro líderes que demuestran que no es necesario parecer grandes, sino ser personas que ven a los demás como superiores en algún aspecto, como posibles maestros de alguna lección. Son líderes que no se encargan de llenar la copa de otros, pero sí de vaciar la suya en quienes estén dispuestos a recibir.

Creo firmemente que un líder que trasciende debe tener altos niveles de consciencia para mantener integridad en torno a sus prioridades. Me he equivocado mucho en esto, gravitando hacia el trabajo. Sin embargo, este año de pruebas me ha enseñado que prefiero ser respetado por mis más cercanos que por quienes no conozco o están lejos de mí. He aprendido que, si logro inspirar a otros, pero no lo consigo en mi casa, habré fracasado en la trascendencia que más importa.

El liderazgo que trasciende no es un destino, sino un viaje. Es un compromiso de cada uno para dejar una huella positiva en la sociedad, comenzando por los tuyos. Como dijo John Maxwell: "La verdadera prueba del liderazgo no es cómo te va a ti, sino cómo les va a los demás".

Ser luz, ser faro para la vida de otros, deja más en la tierra que títulos, posiciones o propiedades.

Si estás leyendo este artículo, date una palmadita en la espalda o replantea mejor tu vida. ¿Aún estás buscando más éxito o estás buscando significado?