Tradición y fe: Semana Santa y su tradición de visitar los monumentos coloniales
Durante la Semana Santa, muchos católicos, residentes y extranjeros tienen por costumbre hacer un recorrido cultural y religioso por los monumentos e iglesias que pertenecen al casco antiguo de esta Primada Ciudad de América, que la UNESCO declaró como “Patrimonio de la Humanidad”, el 8 de diciembre de 1990.
Para quienes se quedan en el Gran Santo Domingo hay muchas actividades culturales que permiten reflexionar sobre el verdadero significado de este tiempo, en el que recordamos la pasión, muerte y resurrección de Jesús, el hijo de Dios.
Cada Jueves Santos, grupo de amigas y amigos ponen en su agenda hacer turismo interno y visitar las iglesias. Esta práctica de ir templo por templo, no solo es simbólica, sino que verdaderamente nos hace pensar y reflexionar las siete palabras de nuestro señor Jesucristo antes de su crucifixión.
Vale recordar que el recorrido de las siete iglesias es una tradición iniciada por San Felipe Neri en Roma. La visita de los templos tiene como objetivo agradecer a Jesucristo y acompañarlo en su camino al calvario.
Algunas de las edificaciones que durante este tiempo y todo el año pueden visitar junto a sus amigos y familiares. Anímese a vivir esta experiencia del Jueves y Viernes Santo visitar los altares de las iglesias y la Catedral para que le regale un remanso de paz a su alma. No olvide hacer una petición y dos si nunca ha entrado a la iglesia a visitar.
Iglesia de San Miguel. En esta iglesia ubicada en la calle José Reyes, esquina Juan Isidro Pérez fue construida hacia 1750 (siglo XVII), alrededor del barrio negro de la ciudad. Tal vez debido a este hecho, el templo se dedicó al arcángel, tan popular en la religión sincrética de los esclavos provenientes de África.
En este punto de partida, recordamos el recorrido de Jesús desde el Cenáculo, donde celebra la Última Cena con sus discípulos hasta el huerto de Getsemaní donde ora durante tres horas, llora y suda sangre. Es aquí donde llegó Judas y con un beso lo entrega a las autoridades hostiles del Imperio Romano.
Iglesia y Convento de los Dominicos. En esta segunda parada meditamos el paso de Jesús desde el huerto de Getsemaní hasta la casa de Anás, donde llega maniatado y es interrogado por Anás sobre su doctrina y sus afirmaciones sobre su padre celestial. Ahí, un guardia abofetea a Jesús en este paso.
Iglesia del Convento Regina Angelorum. En esta tercera parada se reflexiona sobre el paso de Jesús a la casa de Caifás, en donde fue escupido e insultado. Aquí Pedro niega conocerlo tres veces "antes que el gallo cante" (Mateo 26:34). Finalmente, fue declarado reo con pena de muerte.
Iglesia del Carmen. En esta pequeña iglesia construida en honor a la Virgen del Carmen en el año 1615 por la iniciativa de varias familias de buena condición económica de la época, recordamos la comparecencia de Jesús ante Poncio Pilatos, quien era el gobernador romano de la región. El pueblo pide a Pilatos que lo condene a muerte por el hecho de que Jesús se autoproclama rey.
Esta iglesia está ubicada en la calle Arzobispo Nouel, esquina calle Sánchez, justo al frente de la casa de doña Chea donde el 16 de julio de 1838, Juan Pablo Duarte fundo la sociedad secreta La Trinitaria con el objetivo de liberarnos de Haití.
Iglesia y convento de las Mercedes. En esta quinta parada, los feligreses recuerdan el momento en que Jesús compareció ante el rey Herodes, quien le pide que realice algún milagro. Ante la ausencia de una respuesta, el rey y sus guardias injurian a Jesús. Está ubicada en la calle Las Mercedes, esquina José Reyes.
Santuario Nuestra Señora de la Altagracia. Aquí, se reflexiona la segunda comparecencia de Jesús ante Pilatos, quien reconoce que Jesús no es ningún alborotador y que no ha cometido delitos. Sin embargo, claudica ante las presiones del pueblo y adversarios que ven en Jesús una amenaza. Aquí, Jesús es flagelado y sobre su cabeza le colocan una corona con espinas. Esta imponente iglesia pintada de blanco está ubicada en la calle Hostos, esquina Emiliano Tejera.
Catedral Metropolitana Santa María de la Encarnación. En esta última parada recordamos el paso de Jesús desde la casa de Pilatos hasta el calvario llevando una cruz a cuestas. Jesús muere cumpliéndose así las escrituras; ahora debemos esperar para conmemorar que el hijo de Dios resucite en el tercer día. Esta es la meditación final, por lo cual debe ser más intensa y especial.
El Jueves Santo es la Misa Crismal y la misa Cena del Señor con el lavatorio de los pies. La adoración y visitas a los monumentos (altares), desde las 9:30 de la noche hasta la medianoche, con actos oficiados por el arzobispo metropolitano de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria Acosta.
El Viernes Santo siguen las conmemoraciones con el sermón de Las Siete Palabras, de 1:00 a 3:00 de la tarde, con la homilía de siete sacerdotes, junto a la postración y la Sagrada Comunión. La solemne acción litúrgica de la Pasión y Muerte del Señor es a las 3:30 de la tarde.
A las 7:30 de la noche, el Coro de la Catedral Primada de América ofrecerá su tradicional concierto sacro. El Réquiem de Mozart será la pieza central de este recital auspiciado por Banreservas, el cual se llevará a cabo este viernes 29 de marzo. La entrada es gratis hasta llenar su capacidad.
Un comunicado de la institución bancaria refiere que durante la presentación, el coro estará acompañado por su orquesta integrada por 35 músicos. Asimismo, contará con la participación especial de la soprano Pura Tayson, la contralto Verónica Rodríguez y el barítono Eduardo Mejía, como solistas invitados; el tenor Richard Muñoz y el barítono Eddison Samuel Feliz, solistas de la agrupación coral.
En la edición número 35 de este evento cultural, social y religioso, más de 100 voces del Coro vibrarán en ese centenario recinto. La producción y dirección general estarán a cargo de su director titular, el maestro Andrés Capellán, y Rafael Calderón será el director invitado.
Para quienes desean ver el concierto en su hogar, este será transmitido por el canal de YouTube Catedral Primada de América Santo Domingo por el canal 41 de Televida y por Radio María de la Altagracia, medios a los cuales se unen otros canales y emisoras para retransmitir.