Visión del mercado de la Formación Empresarial en Latinoamérica

Situación Actual

El mercado de la formación empresarial se encuentra en una lenta recuperación, debido a la recesión económica que género la pandemia.

En la mayoría de las empresas y sobre todo en las pequeñas y medianas, en situaciones de riesgo se recurre al recorte presupuestario, y el primer recorte siempre se da en la formación.

La progresiva recuperación de las economías internas de nuestros países, va abriendo el espacio para retomar la inversión en la formación y en especial en la coyuntura actual provocada por la pandemia, hay una creciente necesidad de brindar formación empresarial en herramientas blandas al personal para superar miedos, situaciones de estrés, etc. Así como el desarrollo de nuevas habilidades digitales. Muy demandadas actualmente.

“El mercado dela Formación Empresarial seguirá siendo una alternativa rentable y segura para la inversión”.

La formación empresarial no se detiene, en un mundo tan competitivo como el que hemos creado, formar y preparar al personal es y siempre será primordial.

A esto se suman, nuevas necesidades, en donde ya no es suficiente formar en lo técnico, toca trabajar lo humano, como la inteligencia emocional, el Coaching de vida. O nuevas herramientas que el mercado va empujando.

En cuanto a la inversión se está dando, un vuelco impresionante en el desarrollo de programas a distancia, herramientas, plataformas, etc. En esto la apuesta es grande.

Considero que la rentabilidad está en las posibilidades que brinda la tecnología en masificar la oferta, y en bajar los costos de producción, o el costo por curso vendido, sobre todo lo podemos palpar en programas de formación digitales masivos como los MOOD.

 

Cambios de tendencia ocasionada por la pandemia.

Las empresas Latinoamericanas antes de la pandemia, mantenían con gran preferencia la inversión en formación presencial. Y muchas empresas consultoras e instituciones no estaban preparadas para pasar todos sus programas a la virtualidad.

Por otro lado, tuvimos profesionales que literalmente tenían grandes giras como cualquier estrella de Rock, se vieron sorpresivamente inmovilizados.

La pandemia ha generado pérdida de puestos de trabajo, a todo nivel, esto ha hecho que muchos profesionales hayan volcado su experiencia y su tiempo al negocio de la formación, como una opción de trabajo desde casa. Esto ha incrementado la oferta de forma desmedida y sin control. No solo bajando las ventas o el precio promedio de los cursos, si no que hubo un momento a mediados del 2020 que había tanta formación GRATUITA de todo tipo y a todo nivel, que era impensable tomar un curso pago.

Claro, Eso se entendió como un aporte y contribución a la humanidad, por la situación que estábamos viviendo, pero sin duda afecto evidentemente este mercado.

 

Los desafíos del mercado de la Formación Empresarial

El mayor desafío está en entregar valor, y en generar diferenciación entre los competidores. Conseguir un equilibrio entre la oferta de formación paga vs. La formación gratuita que se está disponible.

Por otra parte, trabajar con el cliente la formación planificada de su personal. Trabajar en calendarios de actividades a un año o más, porque en Latinoamérica planeamos mucho a corto plazo. Y las decisiones de los clientes en corto plazo terminan por descartar los programas de alta rentabilidad, por inclinarse a píldoras rápidas. O programas de bajo costo.

Aunque parezca un “cliché” la formación empresarial debe acercarse más aun a sus clientes, que deje de salir a vender programas estandarizados y empaquetados. Es momento de desarrollar programas ajustados a la empresa, en base a su contexto y sus necesidades, bien sea, para su crecimiento, transformación o inclusive su supervivencia. Por lo cual, se espera una formación adecuada al contexto actual, sin perder de vista los objetivos de la empresa y en concordancia con un retorno de la inversión que sea tangible para el cliente.

 

Nuevas oportunidades para el sector de la Formación Empresarial post-crisis COVID-19

Las mayores oportunidades están de nuevo en retomar (con las medidas de bioseguridad necesarias) las actividades de formación presenciales. La gente aprende a dar más valor a las cosas, cuando las pierde.

La formación, sobre todo la presencial, es una muy buen excusa para salir de la rutina. De hecho la forma más rentable que tiene la empresa para motivar a su personal, en una actividad que le da herramientas y a la vez que le permite “refrescar” su mente con nuevas ideas y pensamientos en combinación con el desplazamiento del su cuerpo físico a otros espacios que le recrean y le dan un respiro a la rutina laboral.

Las oportunidades están, para las empresas que sepan combinar la formación con una experiencia agradable (de colores, olores y sabores) y logre desarrollar una “Formación Empresarial Recreativa” que valore la experiencia de la vivencia de la formación como un espacio de aprendizaje.

Los prestadores de servicios de Formación Empresarial debe estar, debe enfocarse en preparar y desarrollar sus talentos para entregar cada día más valor a las empresas.

Yo apuesto por promover una “Formación Empresarial Recreativa”, donde se valore al individuo en todas sus dimensiones (emocional, cognitiva y corporalmente) promoviendo una experiencia de aprendizaje integradora.

En cuanto a la competitividad, debemos estar alertas que desde Europa, principalmente España nos está llegando mucha competencia y de calidad.  La innovación debe venir de la mano de la tropicalización de nuestras soluciones, adaptadas a nuestras realidades Latinoamericanas.

La regionalización más que la globalización… para mí va a ser la tendencia.

 

El Interés de los Fondos de Inversión

El mercado de los servicios es uno de los de mayor crecimiento en el mundo. Y los fondos de inversión siguen buscando invertir en ellos.

Si se logra generar propuestas innovadoras, competitivas y sostenibles, por supuesto que este mercado será visible y apetecible para estos fondos de inversión, que apuestan por crear un mercado empresarial formado y productivo para el mundo de hoy.

Fuente

Daniel Nobrega O.