En mi andar he descubierto que lo que lo incierto a veces podría ser cierto y del mito de repente surgen realidades. El dominicano según se dice vive de «espalda al mar», pero esto va más allá de una razón propiamente cultural y se posa en una realidad de necesidad. Literalmente hablando podemos decir muchas cosas sobre el dominicano, sin embargo, su idiosincrasia es una carta abierta y sacar conclusiones resulta más sencillo de lo que parece.
A raíz de la colonización muchos se vieron obligados a trasladarse al centro de la Hispaniola, no solo por motivos geográficos sino más bien por seguridad. Lejos de las costas nos alimentábamos de lo que la tierra nos daba y se puede decir que esta era bastante generosa.
También cabe destacar la pesca inapropiada e inoportuna que se ha llevado a cabo en las últimas décadas y el descuido de nuestra fauna marina han hecho tambalear nuestros mares, más no en su totalidad. Las riquezas marinas con que contamos son invaluables y para muestra un botón, Sanchez y su banco de camarones es vivo ejemplo de esto. Al conversar con uno de sus hijos me comenta y cito «a veces tenemos tanto y tantos camarones que nos cansamos de comerlos y lo cambiamos por salami», de ahí es bueno saber que todas nuestras provincias con mares fértiles alimentan a su pueblo. En ese sentido concluyo diciendo que en definitiva el dominicano vive «De Frente al Mar» y por esta razón debemos estar agradecidos puesto que nos ha regalado a través de los tiempos platos y referencia culinarias que trascienden fronteras y alimentan nuestro amado pueblo.
En esta oportunidad les traemos un plato que destaca la gastronomía Dominicana, el Pescado con Coco, que luego de una visita a Playa Rincón - Samaná, nos enamoramos aún más de él.

Aquí nuestra versión «De Frente al Mar» ¡Disfrútenlo!